Para presentar una de las áreas clave de nuestro Centro, Asuntos Fronterizos, hablamos con Jeanne Tower Cox, miembro de nuestro Consejo Ejecutivo y Trustee de SMU, quien nos brindó su perspectiva como texana y filántropa en la región fronteriza. Jeanne también es hija del fallecido Senador estadounidense John Tower, servidor público durante muchos años, experto en defensa y partidario de tener lazos fuertes entre Texas y México.
¿Por qué decidió servir en el Consejo Ejecutivo del Centro Texas-México? ¿Qué logros espera del Centro?
Quise servir en el Consejo del Centro SMU Mission Foods Texas-México por mi admiración hacia la gente de México, mi amor por Texas y porque entiendo la importante relación entre ambos. Yo espero que el Centro Texas-México promueva una mejor relación entre Estados Unidos, Texas en particular, y México a través de oportunidades culturales y educativas conjuntas y a través de investigación y la promoción de dicha investigación sobre asuntos relevantes que afectan a ambos países, como comercio, migración y relaciones económicas.
¿Desde su punto de vista, por qué México es importante para Texas?
El compartir casi 2,000 millas de frontera con nuestro vecino del sur hace imperativo que nos entendamos mutuamente. México es nuestro socio comercial más grande y proveedor de una gran parte de la fuerza laboral de Texas.
Como texana de toda la vida ¿cómo se ha transformado la frontera Texas-México a lo largo de su vida? ¿Qué cambios, si es que ha habido, ha notado en la relación transfronteriza entre Texas y México?
En los años 50s y a principio de los 60s, los trabajadores mexicanos no enfrentaban las dificultades que enfrentan ahora para trabajar en Texas. Programas como el Programa Bracero, que permitían a trabajadores mexicanos venir a Estados Unidos estacionalmente, eran comunes. Esto permitía a miembros de la familia permanecer en México, a mantener niños en la escuela allá y a que salarios fueran enviados a casa legalmente. Nuestra política migratoria hoy en día es un lío y claramente no cubre las necesidades ni de los migrantes ni de los empleadores estadounidenses. El Congreso debe absolutamente abordar estos asuntos y espero que el Centro Texas-México sea una manera importante y útil para ayudar a educarlos en la creación de política informada y significativa.
¿Qué le diría a alguien fuera del estado que dice que tiene miedo de lo que está sucediendo a lo largo de la frontera Texas-México?
La gente fuera de Texas a menudo tiene ideas erróneas acerca de cómo es la frontera Texas-México. Cuando era niña con mis padres y sus amigos del Sur de Texas manejábamos a través de la frontera y de regreso para ir a cenar, o para ir de compras. La gente mexicana es amigable, cálida y trabajadora, y valoran la fe y la familia. Muy similar a los texanos. Son vecinos estupendos.
¿Qué espera de los responsables de política pública en Texas y Washington encargados de asegurarse de que la frontera funcione de manera segura, efectiva y eficiente?
Yo creo en fronteras fuertes y seguras. También creo en el Estado de derecho. La falta de una política migratoria cohesiva, razonable amenaza a ambos.